¿Quién es Antonio? ¿qué recuerda Antonio? ¿Cuántos Antonios están en enterrados en las Islas Soledad y Gran Malvinas sin que sepamos realmente quiénes eran?
Facfolc, la nueva obra dirigida y escrita por Fernando Locatelli –Hotel de ruta, Ricardo- es un pedazo de historia, acaso la más oscura que vivimos los argentinos en el Siglo XX. Es el recuerdo de un joven, interpretado por tres actores: Cristian Aguirre, Guido Díaz y Guillermo McDonell, que representan la memoria de uno, uno como ellos, uno como cualquiera de nosotros a los 18 años. Que llegaba del colegio y tomaba la gaseosa que le daba la madre, que tenía sueños, que gritaba los goles del Mundial 78 sin tener idea de lo que sucedía realmente en el país.
Ese manto de neblina es la mentira que nos vendieron. Tres tiempos: el mundial, el día previo a partir y la cruda e inevitable realidad que estos conscriptos con poco o nada de experiencia en el servicio militar, tuvieron que enfrentar en poco más de dos meses de batalla.
A través de una puesta minimalista, Locatelliy el elenco siguen una cronología no lineal para narrar la mente, los pensamientos y reflexiones de este personaje. Pero Facfolc, funciona como una máquina del tiempo, una memoria colectiva donde se revive todo el proceso militar, con la incertidumbre del momento, las dudas y la sorpresa de descubrir una maquinaria de muerte, disfrazada de poder ejecutivo.
Una iluminación oscura, apenas visible, refleja la tortura física y psicológica, a través del frío, el hambre y el desamparo que debían vivir los combatientes. Son apenas 50 minutos, que dan pie a la discusión, más de 30 años después acerca de las consecuencias sociales de la Guerra, una guerra que comenzó en 1976.
El trabajo físico y emocional de los intérpretes es clave para adentrarse en la mente del personaje. Desde el periodo de estudios, pasando por un estricto entrenamiento y la convivencia en las islas, Locatelli recrea atmósferas y sensaciones. Se trata de una obra que apela a la empatía a través de emociones. Humanizar la historia. No estamos hablando de un número más entre las víctimas. Cada número era una persona y eso refleja Facfolc, pero sin apelar al sentimentalismo ni el golpe bajo. Todo lo contrario, a pesar de pretender apuntar a la nostalgia del público, es una obra fría, tan fría como el clima de las islas.
Aguirre, Díaz y McDonell consiguen poner la piel de gallina con cada recuerdo que sale a la luz: los amigos que desaparecen, los compañeros de batalla que no están de un momento a otro. El contexto construye el pasado y presente de este héroe olvidado.
Facfolc, es una obra oscura, tan oscura como nuestro pasado, pero fundamental para seguir discutiendo, sin negar ni olvidar, para seguir gritando Nunca Más.
Facfolc se puede ver en KOWALSKI CLUB DE CULTURA, Billinghurst 835 los Sábados a las 22:00 hs., hasta el 26 de Noviembre con entradas a la venta a $ 150,00.
