¿Alcanzaba con traer el recuerdo de la música de la apertura de El Llanero solitario -The lone ranger-, el caballo Plata, el antifaz como para salirse con la suya?
Es poco lo que puede valorarse de este nuevo Llanero solitario -The lone ranger- muy mal interpretado por Armie Hammer, que personificó a los gemelos en Social Network, básicamente porque el personaje le queda demasiado grande al lado de Toro ?¿quién podría haber sido sino Johnny Depp?- queda absolutamente opacado, de la misma forma que el resto del elenco compuesto por William Fichtner en el rol de villano de turno Butch Cavendish, Tom Wilkinson en un papel ajustado a sus características pero que no se luce, Ruth Wilson, Helena Bonham Carter con un personaje exótico pero descartable, James Badge Dale, Bryant Prince, Barry Pepper, Mason Cook.
El exagerado presupuesto bajo la tutela del Rey Midas, el productor Jerry Bruckheimer, es directamente proporcional a la excesiva duración de una trama que intenta explotar la veta paródica del personaje enmascarado y su secuaz sin conseguirlo y tal vez molestando a aquellos espectadores que busquen cierta cuota de seriedad y respeto por El Llanero solitario -The lone ranger- más que nada por el vínculo nostálgico que por otro motivo.
Los orígenes de El Llanero solitario -The lone ranger-, héroe que debe elegir entre la justicia institucional y la propia para vengar la muerte de su hermano, junto al inseparable comanche Toro, ocupan el centro de esta historia que se estructura en un tiempo presente y evocativo con un Toro anciano que recuerda sus épocas de juventud y de aventuras con El Llanero solitario -The lone ranger- ante un interlocutor menudo, de quien depende creer o no la historia, entrelazado con el pasado del Oeste, la lucha del hombre blanco contra los aborígenes para imponer el progreso del tren y luego la codicia de la extracción de plata.
Si bien las secuencias de acción están logradas, el abuso del digital para hacerlas más espectaculares opera en contra aunque no así el timing de cada escena y la inserción de pasos de comedia al mejor estilo slapstick, donde se destaca el talento de Johnny Depp.
Sostener que El Llanero solitario -The lone ranger- es en cierta medida heredera de Piratas del Caribe por el resultado a juzgar parece descabellado y bastante injusto para la trilogía del corsario Jack Sparrow y haber depositado la confianza una vez más en el director Gore Verbinski, quien ya había incursionado en el terreno del western con la anárquica Rango, deja el interrogante abierto sobre qué es lo que falló para que esta renovada versión llegara a la pantalla grande con mucho ímpetu aunque con el caballo cansado.