Facebook, la red social que supo desarrollar y dirigir el hoy magnate Mark Zuckerberg, se encuentra ya hace un par de años tratando de combatir la información falsa y fraudulenta que muchas veces circula sobre la plataforma.
Esta no es la primera, ni será la última, de las campañas que Facebook comienza en contra de los desinformantes y engañadores, usuarios que inventan y comparten información no veraz para lograr distintos objetivos relacionados a la viralización de esos datos.
En este caso en particular, y según el anuncio realizado por Facebook, la censura apunta a la práctica de cloaking, el arte de camuflar el real destino de un anuncio, o publicación, o el contenido real de la página de destino. En términos de seguridad IT: casi un fishing.
Pero, si bien el anuncio es a priori interesante, continúa explicando que su lucha es contra “la desinformación y experiencia que pueden llevar a engaños”, técnicas relacionadas con el cloaking que son utilizadas para evadir los sistemas de análisis de anuncios y contenidos en internet.
Facebook declara que esta nueva política, más fuerte de lo normal, busca eliminar a aquellos anuncios y publicaciones, vetando también a los propios usuarios infractores, que dirigen a las personas a sitios web y contenidos que violan las normas de Facebook, así como sus reglas comunitarias y las políticas de anuncios de la propia red.
Entre los contenidos fraudulentos más comunes, se encuentran las pastillas para adelgazar, pornografía o estafas online, ingresando desde anuncios y publicaciones que poco tienen que ver. Cuestión que ha generado que Facebook eliminara a miles de usuarios infractores en los últimos meses. "Los anunciantes y las páginas capturadas usando el encubrimiento serán removidos de la plataforma", aclararon desde la compañía.
Pero, cabe mencionar que la brecha entre este contenido y el original, censurado por cuestiones ideológicas, puede no distar demasiado. Los métodos de censura, utilizados para bien o mal, son métodos de censura, y queda en quien realizar la censura, esa fina línea entre lo correcto y lo que no lo es.
Por eso, Facebook también aclara cómo es el proceso para determinar e identificar cloaking en la plataforma: utilizando inteligencia artificial, y expandiendo los procesos junto a equipos de analistas, para una mejor identificación, captura y verificación de este tipo de publicaciones encubiertas.
Cada usuario deberá, entonces, ser consiente y mantenerse atento para saber si estas nuevas herramientas, en conjunto con las nuevas prácticas y políticas de Facebook son una lucha encarnizada contra la desinformación masiva, o una excusa para poder censurar a piacere.