Macri estuvo con el Papa Francisco, la reunión
se desarrolló con una mejor predisposición que la anterior, pero el Sumo Pontífice
antes de finalizar la misa en la que canonizó al cura cordobés José Gabriel
Brochero,les recordó la realización de la Jornada Mundial contra la Pobreza y
exhortó a los presentes,con Macri en primera fila,a unir fuerzas morales y
económicas para luchar juntos contra la pobreza que degrada, ofende y mata a
tantos hermanos y hermanas, implementando políticas serias para las familias y
para el trabajo.
En ese contexto el jefe de gabinete, Marcos
Peña, admitió que durante el timbreo encontró gente casi llorando y diciéndole
que habían perdido el trabajo o que ya no les alcanza la plata.
El funcionario consideró que el país atraviesa
de forma continua un ciclo de ilusión y desencanto reflejando que el país
siempre ha tenido esa dificultad entre proteccionismo y apertura.
Respecto de una de los problemas del plan
económico de apertura de Cambiemos, Peña minimizó el creciente endeudamiento
exterior para cubrir gastos públicos, además reconoció que la ex presidente
mantiene un voto cautivo del 25 por ciento.
En cuanto a los tarifazos en los servicios de
gas y luz, Peña reconoció que hubo varias discusiones hacia el interior del Poder
Ejecutivo, pero destacó la flexibilidad del Gobierno que los saca del lugar de
la omnipotencia.
Otro que puso al Presidente con los pies en la
tierra fue Cristiano Rattazzi, CEO de Fiat, quien en plena puja por las paritarias,
el bono y el paro general, admitió que la única norma que se debe cumplir es
que si hay huelga, los salarios no se pagan.
El ministro de Educación, Esteban Bullrich
emitió juicios de valor contra el sistema educativo y los planes sociales. Del
sistema educativo expresó que no sirve más porque es una máquina de fabricar
chorizos y que los planes sociales sirven para comprar balas
Macri estuvo en Europa esperando inversiones venidas
del cielo y aprovechó para visitar al Papa, pero acá en la tierra, sus
ministros y asesores lo embarraron con el lodo de la política